1Timoteo 1,12-17
"Doy
gracias a aquel que me ha dado fuerzas, a Cristo Jesús nuestro Señor, porque me
ha considerado fiel y me ha puesto a su servicio, a pesar de que yo antes
decía cosas ofensivas contra Él, lo perseguía y lo insultaba. Pero Dios tuvo
misericordia de mí, porque yo todavía no era creyente y no sabía lo que hacía. Y nuestro Señor derramó abundantemente
su gracia sobre mí, y me dio la fe y el amor que podemos tener gracias a Cristo
Jesús. Esto
es muy cierto, y todos deben creerlo: Que Cristo Jesús vino al mundo para
salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero. Pero Dios tuvo misericordia de mí, para que Jesucristo
mostrara en mí toda su paciencia. Así yo vine a ser ejemplo de los que habían
de creer en Él para obtener la vida eterna. ¡Honor y Gloria para siempre al Rey eterno, al
inmortal, invisible y único Dios! Amén."
Palabra de Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario